Reparación de las victimas… Un sofisma permanente

Contenido principal del artículo

Marcela Del Pilar Rodriguez Novoa

Resumen

Pienso en Rosa Cruz, una víctima imaginaria, como todas las demás, oriunda de Socotá, un pueblo escondido en el mapa, en el departamento de Boyacá, tenía 4 hijos, y vivía con su esposo el jornalero Evaristo, en la finquita ubicada en la vereda agua de Dios. Un día lluvioso, se desataron los enfrentamientos entre la guerrilla y los paramilitares quienes se disputaban el territorio como corredor del narcotráfico camino a Venezuela, no podían salir de la casa, ella solo le rezaba al Dios del cielo mientras goteaba en el solar, “-Papito lindo que a mis niños no les pase nada, que algo aleje a estos salvajes.”

Detalles del artículo

Sección
Articulos